¿Qué tienen en común el ex jugador de baloncesto Fran Murcia, el futbolista culé Dani Alves, el actor Brad Pitt o el comentarista del corazón Kiko Matamoros? Básicamente que han eliminado sus orejas de soplillo sometiéndose a una operación de cirugía facial que responde al nombre de otoplastia.
Esa es una intervención muy habitual dentro del conjunto de clínicas especializadas en cirugía estética y plástica en Sevilla y se caracteriza por los siguientes aspectos:
- Permite corregir tanto la posición de las orejas como también su forma.
- Lo habitual es que se realice con anestesia local y de manera ambulatoria, por lo que no se requiere ningún tipo de hospitalización.
- Es una operación sencilla que, no obstante, requiere minuciosidad a la hora de poder transformar el cartílago pertinente tal como se desea.
- La cicatriz que se acomete detrás de las orejas es prácticamente invisible.
- Para lograr la perfecta recuperación, el paciente intervenido deberá estar varios días con un vendaje, dormir con una cinta de tenis y pasados los quince días se le retirarán los puntos. De esta manera, es como los cirujanos plásticos de Sevilla indican que se conseguirá la mejor curación de la operación.
A grandes rasgos, estas son las principales señas de identidad de la otoplastia, que trae consigo un importante número de ventajas:
- Se consigue una imagen mucho más simétrica.
- Mejora la autoestima de la persona operada, que se siente mucho más segura de sí misma al tiempo que con mayor atractivo.
- Indiscutiblemente es una forma de que quien tenía orejas de soplillo deje atrás sus complejos, motivados muchas veces por las bromas de los demás, y comience a peinarse ya dejándolas al descubierto.